Carmen ha sido una de esas personas a las cuales le pedí una de las acciones más crueles que como amigo le puedes solicitar a alguien y es que estime tu obra. Fiel a nuestra amistad, así lo hizo y hoy agradezco todas y cada una de sus palabras.
Opiniones que me invitan a reflexionar:
Excepcional. Como se puede escribir una obra sin edad. Un menor leerá un bello cuento, un adulto una historia con múltiples facetas para reflexionar. Pero el lenguaje utilizado y sus ilustraciones son… es una obra que hay que leer.
Su lectura es un vuelo de colores dentro de tu mente y tu alma. Es una obra que te atrapa visualmente y que está llena de matices, revelando la sensibilidad de su autor, a través de la etérea vida de sus protagonistas.
Un viejo amigo, que sé quien es y lo conozco, vuelve a sorprenderme por la profundidad de su lenguaje, de sus imágenes y al crear una metáfora que ha vuelto a evidenciar su persona y su excepcionalidad como escritor.
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A lo largo de las últimas semanas me he encontrado con personas que me han ofrecido su opinión sobre "Alas de Amapola". Es gratificante para un escritor, que alguien a quien no conoces se acerque y te hable de tu obra, que amistades se involucren en que una obra escrita llegue a más y otras cercanas al mundo de las letras deseen ofrecerte su valoración más sincera. A todas esas personas, a todas ellas, gracias. Cada palabra se guarda con celo y servirá para seguir escribiendo.
