Existen personas muy importantes en nuestras vidas y en mi caso, hay que sumarle la de los libros.
A lo largo de los años, Isabel Mª., Claudia, Inma y Eva han estado ahí, acompañándome en cada instante, siendo pacientes y siempre ofreciendo esa palabra amable con el objeto de que siguiera escribiendo esa obra que desde el primer día se convirtió en la ilusión de un sueño. A Isabel Mª. y Claudia, gracias por soportar mis largas ausencias junto a "La Nave de los Vientos", a Inma por ser la editora que más alienta mi más pura fantasía, y a Eva, por siempre ser paciente en la espera de esa nueva historia que pide, anhela y cuida.
Fue un día intenso porque Isa e Inma se pusieron a desarrollar ideas
sobre esa obra que próximamente estará entre vuestras manos, haciendo suyas un sueño.
En la misma mesa en la cual volví a ver los libros de Noissha y
Sueños sobre los libros de Indicavía, pertenecientes a la
La Nave de los vientos, nació la idea del próximo libro.
(Sobre la mesa los libretos originales de Noissha y
Sueños sobre los libros de Indicavía).